The Ring (2002) es una película de terror psicológico dirigida por Gore Verbinski, basada en la cinta japonesa Ringu. La historia comienza con la misteriosa muerte de una adolescente poco después de haber visto una cinta de video maldita. Se rumorea que cualquier persona que vea ese video recibe una llamada telefónica inmediatamente después, anunciando que morirá en siete días. La periodista Rachel Keller, interpretada por Naomi Watts, comienza a investigar la leyenda tras la muerte de su sobrina.
Movida por el escepticismo y la preocupación, Rachel ve la cinta y efectivamente recibe la llamada. Con solo siete días para vivir, se embarca en una carrera contrarreloj para descubrir el origen de la maldición. Su investigación la lleva a descubrir la historia de Samara Morgan, una niña con habilidades psíquicas perturbadoras que fue adoptada por una familia y terminó sus días en circunstancias trágicas.
A medida que Rachel profundiza en la historia de Samara, los elementos sobrenaturales se intensifican. Las pistas la llevan a una cabaña aislada donde Samara fue encerrada, y finalmente al pozo donde su cuerpo fue arrojado. Rachel cree que darle un entierro digno a la niña podría romper la maldición. Sin embargo, poco después, descubre que su comprensión del misterio era errónea.
El verdadero terror se revela cuando el hijo de Rachel, Aidan, le dice que nunca debió ayudar a Samara. La maldición no se detiene con la liberación del cuerpo: el video sigue funcionando como vehículo de la maldición. La única forma de evitar la muerte es hacer una copia de la cinta y mostrársela a otra persona, perpetuando así la cadena del horror.
En resumen, The Ring es una película que redefine el género de terror al combinar atmósfera inquietante, misterio sobrenatural y una narrativa envolvente. Explora temas como la muerte, la culpa y la transmisión del mal a través de la tecnología. Su enfoque visual sombrío y su tensión constante la convirtieron en una de las películas de terror más influyentes de los años 2000.