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La historia comienza con Geppetto, un humilde carpintero solitario que fabrica una marioneta de madera con la esperanza de tener un hijo. Para su sorpresa, la marioneta cobra vida y se convierte en Pinocho, un niño travieso y curioso que rápidamente se muestra rebelde e impulsivo. Aunque Geppetto intenta criarlo con cariño, Pinocho escapa y se embarca en una serie de aventuras peligrosas que lo alejan cada vez más de su hogar.
A lo largo de su viaje, Pinocho se encuentra con personajes misteriosos y muchas veces engañosos, como el Zorro y el Gato, quienes lo manipulan y lo llevan por caminos equivocados. En lugar de ir a la escuela como prometió, Pinocho cae en trampas que lo convierten en víctima de mentiras, estafas y castigos, reflejo de su ingenuidad y desobediencia. Cada decisión equivocada lo aleja más de su deseo de ser un niño de verdad.
En su camino, Pinocho también conoce figuras mágicas como el Hada con el cabello azul, quien actúa como una guía y madre simbólica. Ella le da varias oportunidades de redimirse y cambiar, pero Pinocho sigue tropezando con sus errores. Su nariz, que crece cada vez que miente, se convierte en un símbolo visual de las consecuencias de sus actos y de su evolución moral.
La película se sumerge en un mundo fantástico pero oscuro, lleno de criaturas extrañas, escenarios sombríos y momentos de tensión emocional. A través del sufrimiento y la experiencia, Pinocho comienza a comprender el valor de la honestidad, la responsabilidad y el amor verdadero. Solo al enfrentar las consecuencias de sus errores y mostrar arrepentimiento logra acercarse a la redención.
Al final, tras muchas pruebas y el sacrificio de su padre Geppetto, Pinocho demuestra su crecimiento y su deseo sincero de cambiar. Como recompensa, se transforma en un niño de carne y hueso. Pinocho (2019) es una adaptación fiel y visualmente impresionante del clásico de Carlo Collodi, que combina realismo mágico, emoción profunda y una reflexión atemporal sobre la madurez y la humanidad.